Desde hace unas semanas no dejan de salir pececitos por la tele. Ojalá el motivo hubiese sido otro, pero no. Ha sido porque alguien no quería tener a Gabriel en su vida, mostrando así la parte más oscura del ser humano…
Pero de la misma manera que está esa parte oscura, hay otra que es extraordinaria. “Maestra ¿por qué no hacemos peces para Gabriel?”, me pareció una propuesta muy bonita. Nuestros niños y niñas ven la televisión y no permanecen ajenos a las noticias, noticias y hechos que les llama la (...)